Los 5 Mejores Platillos de Hollywood

Un patio delineado por macetas encuadra el Salt’s Cure, un restaurante y bar con un cálido esquema de colores madera, rojo y blanco. Adentro, Chris Phelps prepara comida tradicional con ingredientes impecables. La pierna de pato con hot cakes de avena a la plancha es una excelente alternativa para el pollo con waffles. Los crujientes hot cakes se preparan con avena, mantequilla, azúcar y huevos, y se ha hecho tan popular que abrieron un restaurante alterno: el Breakfast by Salt’s Cure. El menú para la cena presenta hot cakes acompañados de una pierna de pato con hueso sazonada con especias que se llevan bien con la avena, como granos de pimienta, canela y clavo. La carne se envuelve en papel aluminio y se cocina lentamente durante la noche en aceite de oliva y grasa de pato residual, con exquisitos resultados. Los hot cakes vienen acompañados de una porción de mantequilla de melaza y con manzanas asadas con cáscara de Pink Lady. En invierno, el acompañamiento cambia a mermelada de naranja sangre, en referencia al pato a la naranja. Chris creó este combo para la cena de cumpleaños 50 de su madre, y es un regalo que sigue dando.

El Rodded es uno de los más viejos restaurantes tailandeses de L.A., con más de cuatro décadas de operación, mientras se las arregla para mantenerse en el gusto del público. Entre los actuales dueños se encuentran Prontip Komenkul, su esposo Loesjai, y su hijo Danny, quien está guiando el negocio familiar hacia el futuro. La sopa de fideos con pato es su platillo insignia, y cuenta con caldo de pato con una muy sazonada carne de pato estofada con soya, canela y otros secretos del chef. Usualmente, la sopa de fideos viene con pechuga rebanada, brotes de frijol, guarnición de vieiras, cilantro y ajo tostado. Si te sientes de ánimo aventurero, pide “todo” y recibe partes adicionales de pato como el hígado y las patas. Tu más grande decisión será qué fideos ponerle a la sopa: fideos chicos, de huevo, planos, de arroz o fideo celofán.

El chef Kwang Uh y su socio Matthew Kim caminan por la frontera entre la innovación y la tradición en el Baroo, su restaurante sin letrero en un centro comercial que tiene el nombre de un tazón que los monjes budistas usaban para sus alimentos. Kwang es un campeón de la fermentación, que se encuentra también en uno de sus platillos insignia: el arroz frito kimchi. La gente conoce el kimchi, y ellos conocen el arroz frito, pero Kwang le parece que la mayoría de las versiones son muy pulposas, así que llevó su platillo en una dirección completamente diferente. El arroz basmati de grano largo marca Amira se mezcla con vívidos ingredientes como un kimchi fermentado a la piña, chorreando huevo sous vide a 63 ºC espolvoreado con trigo tostado y quinoa, gremolata, salsa de jalapeño y piña, papitas fritas moradas, algas secas y micro-verdes. Mejóralo con tocino y chorizo español si te gusta la carne.

El chef Ludo Lefebvre y sus socios Jon Shook y Vinny Dotolo han convertido una pequeña placita comercial en un destino con sus finas cenas en el Trois Mec y el bistro Petit Trois. Ludo presenta clásicos franceses en el Petit Trois como filetes fritos y lenguado a la meunière, pero más gente gravita hacia un aparentemente humilde omelette. Por supuesto, este omelette está lejos de ser sencillo. Se preparan cinco huevos para quedar esponjosos, cargados con una porción de toda una semana de queso pimienta Boursin, doblado y con guarniciones de cebollino y sal de mar. Cada plato viene con un baguette de Colleen DeLee y una brillante ensalada de lechuga aderezada con vinagreta Dijon, chalotes y aceite de semilla de uva.